Microhistorias Navideñas 2024 (P.II)

 


MICROCUENTOS

 NAVIDAD II

 (2024)




Día 17: Aguinaldos

Asomado a la ventana veo a Felipe, el niño nuevo del barrio, mira algo temeroso hacia la sala de estar de mi casa, a veces creo que intenta hablarme pero se va rápido casi espantado… sus padres viajan mucho y este es el nuevo destino me contaron pero será más fijo pues sus abuelos lo cuidaran, su mejor regalo será cuando lo invite a jugar con mi nuevo videojuego.

 

Día 18: Cartas a Santa

Una tarde de videojuegos en la play 1 fue suficiente para que Felipe hiciera un nuevo amigo; Mateo, muy extrovertido y lleno de imaginación y él algo introvertido, pero juntos escribieron sus cartas a Santa, cada uno ayudó y fue el inicio de una nueva tradición de amigos, las tardes para visionar el futuro y el cómo encontrarán sus regalos en el árbol.

 


Día 19: Feria de juguetes

Ana Lucía siempre ha sido muy de leer y pocos juguetes, pero eso sí, no perdía la oportunidad de ir a la feria de los juguetes; había una razón cada año y este no era la excepción; hay un juguete que viene diseñado como el personaje favorito de sus libros más queridos; Don Misterio.


Día 20: Anhelos infantiles

En la infancia solemos desear lo más increíble del mundo y más allá. Queremos descubrir todo lo mejor. Sin embargo, Toñito aunque muy chico desea algo diferente este año; algo que no necesita dinero ni tarjetas solo una gran esperanza, quiere ver a su papá entrar nuevamente, él se perdió en el mar desde agosto, y hoy es navidad… quiere de regalo a su papá sano y salvo.

 

Día 21: Luces en el cielo

Mariana vive una rutina agitada desde que trabaja en la capital, las luces son tan estridentes y hostigantes que pareciera rayos furiosos. Sin embargo, espera a diciembre para hacer sus maletas y volver a casa. Las luces del cielo vista desde su terraza ayudan a curar el cuerpo mientras toma chocolate con mamá y papá.

 

Día 22: Calidez

Hay algo que tiene claro, desde siempre y eso es que tiene un lugar al cual regresar cuando siente que todo va en su contra, un lugar que lo espera aunque lo olvide, un lugar que brilla en la víspera mientras el ruido citadino irrumpe sin remedio en la vida de todos. Es el hogar donde nació y que en navidad se llena de calidez y amor.

 


Día 23: Una visita a la iglesia

Cada día octavo de la novena, mi madre acompaña a mi abuela Meme a la iglesia, es una tradición de mucho tiempo asistir para llevar donativos a niños y abuelitos solitarios de los asilos. Al comienzo fue extraño para mí, pero ese sentimiento se volvió casi una añoranza, parte de la magia y energía de diciembre que aflora mientras se piensa en una felicidad completa.

 

Día 24: El fin de la novena

Hoy es el último día, tras 9 noches de oración y celebración hoy todos salen; unos reciben la misa, otros corren mientras llevan a cuestas bolsas y maletas enormes. Aunque es un día feliz y familiar, la turbulencia y el caos comercial rigen un ambiente contrario al hogareño, todo sea por tener todo listo a la hora de dar las gracias y tener la cena.

 

Día 25: Galletas y leche

La noche de mis infancias recuerdo que dejaba leche y galletas para Santa, era la manera de demostrar mi gratitud por su esfuerzo de venir y dejarme los juguetes de mis sueños. Hoy en día solo dejo un té y chocolate, el santa de mi presente es tan curioso para comer como mi padre y mi madre.

 

Día 26: Mañanas de cielo terciopelo

Tras la navidad y el desvelo prolongado de los últimos días, se asoma el sol del fin de año, lleno luz y calor, pero es un calor acogedor, un calor que muestra que tras las tormentas hay calma y esa calma es la pionera de las decisiones sabias. Y eran estas mañanas las que más esperaba cuando de niño salía a jugar con mis amigos, las mañanas suaves de diciembre.

 

Día 27: El último viernes del año

Es el viernes más raro del año, es el último, y el más soleado de todos. La brisa sigue fuerte y alegre, eleva todo a su paso, las luces apagadas del día bailan al son que la brisa cante; revolotean y titilan en el aire mientras dejan una melodía efímera en los oídos de quienes pasan.

 

Día 28: El llanto de los inocentes

Años atrás me gustaba este  día porque podía hacer bromas y jugar casi a libertad, bueno dependiendo de la clase de broma. Fue entonces, cuando mi abuela Meme me contó las historias del origen de la navidad y el día de los inocentes, es curioso pensar ahora que un día de lágrimas se haya convertido en un día de bromas; quizás es la forma más bonita de simbolizar la inocencia de las personas.

 

Día 29: Buscando trigo y sahumerio

Domingo, la casa está algo patas arriba, mamá tiene todo en desorden y lleva desde temprano desarmando, sacudiendo, guardando cosas y sacando otras. Es el día más trajinado del año; es la limpieza de año nuevo. Donde toda la casa se convierte en un enjambre de recuerdos dispuestos a moverse para recibir nuevos recuerdos. Mientras papa sale al centro por sahumerio y trigo para la mesa.

 


Día 30: Las uvas y el vino

Este año cumplí 15, sigo siendo joven pero podré tomar un poco de vino en año nuevo junto a las uvas. Es la tradición de la casa y quería participar de ella, era parte de mis anhelos de niño, ahora puedo hacerlo y aunque sea extraño ahora esperé hasta esta fecha para que mi primera copa fuera con papá y mamá.

 

Día 31: La nueva meta

El día está cálido y lleno de brisa, hace sol, pero se ve nubes grises. Quizás llueva, quizás serene, quizás solo sea el sol, pero lo mejor es que será el inicio de nuevas metas, no importa cómo, siempre el 31 ha sido especial para la casa y para todos, porque es la oportunidad de comenzar de nuevo.


Extra: El mundo en pausa.

Si hay algo que tiene la hora 00.00 es que se entiende que todo inicia y todo cambia. El amanecer de este miércoles es tranquilo, las calles solitarias solo recuerdan que por unas horas todo se siente diferente como cuando ves llover una tarde y solo esperas que pase mientras el olor a tierra mojada que invade los sentidos para llevarnos a una realidad menos acelerada.



Nos vemos en la siguiente entrega de microhistorias.

Comentarios